07 enero, 2021

Imperio Barbarie/EEUU-Trump- Cae el “Faro de la Democracia”... AFSCH-07/01/2021

 Noviembre 2018-LR-Grafica- 07/01/2021-

Imperio Barbarie/EEUU-Trump-

Cae el “Faro de la Democracia”...

Mientras el acto formal, de confirmación de los resultados electorales, en las elecciones del 03 de Noviembre de 2020, que marco la victoria de Joe Biden, (Democrata), desalojando de la Casa Blanca a Donald Trump. El actual Presidente, convoco a sus seguidores, a impedir que esto sucediera, literalmente llamo a armarse para evitar, lo que él denuncia como un fraude, que le robo el gobierno.



(La Retaguardia-Papel-Nov 2018)Rara coincidencia, las denuncias de reaparición del fanatismo totalitario alrededor del mundo, los crímenes cometidos por hordas violentas, que tienen entre sí, un rasgo distintivo, el deseo de exterminar a grupos o individuos, que identifican con el concepto de igualdad, o que representan minorías. Estos grupos, ganan elecciones, son militantes dirigidos por aquellos, que desde los púlpitos de la “democracia” evocan el miedo y el odio.”

La barbarie ha demolido los límites de la convivencia en sociedad, los forajidos tienen las manos libres para matar.-


Hoy, 07 de Enero de 2021, la realidad supero todos los cálculos. Lo que está pasando en EEUU, nos muestra la degradación simbólica, más dramática del concepto, democracia. Las hordas balbuceantes, tomaron el Palacio de las Leyes, el Capitolio. Desde la Casa Blanca, el archivillano Donald Trump, al modo de la serie “Gotham”, envío a sus “tropas” con orden de matar. Cuatro muertos, 20 heridos, 14 policías heridos, se tomo el Congreso por más de seis horas, robaron, destruyeron muebles, se apoderaron del despacho de la Presidencia de la Cámara, orinaron en el sillón del Presidente del Congreso, lxs policías, les abrieron las puertas a los terroristas y se sacaban selfies con ellos.


Lo que demolieron, es la fantasía naif, que tienen de sí mismos, los estadounidenses. Ya no se pueden engañar creyendo, que después de JFK, la integración racial existe; que son la potencia económica mundial, que asegura el bienestar de todos sus ciudadanos. Que llamados por el “destino manifiesto”, de EEUU, como gendarme global para imponer la Democracia, Libertad e Igualdad, son una farsa que se uso, para invadir, saquear, exterminar a millones de personas, sin razón ni motivo, salvo, imponer el terror, para no ser atacados. Generando el desprecio de quienes son sus aliados.


 (La Retaguardia-Papel-Nov 2018)Los grupos evangélicos son un actor en la vida política, logrando una inédita influencia, ganando terreno al catolicismo. Su poder crece día a día como contracara al avance de los movimientos feministas, de las minorías sexuales e identidad de género, con un discurso conservador, autoritario y totalizador. Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG)"


El triunfo totalitario que logra gobernar por medio de elecciones, imponiendo el Imperio de la Barbarie, significa un retroceso que afecta los valores Humanos, y nos somete limitando hasta la asfixia las libertades individuales.


¿Cuánto escándalo es necesario, para hacer retroceder la barbarie?

Es acertado, definir este retroceso como Barbarie, y no con gentilicios de nombres propios, no es Trump, o los trumpistas, la cuestión de fondo. Los millones que se identifican con esta conducta, que se asumen como “soldados”, lo harían igual si no existiera Trump. Seria otro, el aglutinante que englobara a las masas totalitarias, supremacistas.

El monstruo habita en el interior de las personas, que por motivos diversos encontrarían la forma de desarrollarse, destruyendo a su paso, los limites de convivencia entre distintos. Destruyendo a su vez, las barreras de la Ley, los Códigos y Reglamentos, que les impiden, ser naturalmente libres, para ejercer, la Ley del más fuerte, del ignorante que aborrece todo conocimiento científico actúa y se rige según, por odio y violencia en cumplimiento del que supone, deseo del “Líder”.

Hoy podemos decir, que cayo el Faro de la Democracia, una mentira que se mantuvo viva por demasiado tiempo.

















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