“Yo sí creo que es el turno de los ofendidos y ofendidas, es el turno del pueblo hondureño, este 30 de agosto, Día Nacional del Detenido Desaparecido, de concurrir a demandar, pero sobre todo a evidenciar la deuda histórica; tanto del pasado como del presente, que hay en temas de derechos humanos”
~ Bertha Oliva coordinadora de COFADEH.
En Guatemala, familiares siguen exigiendo justicia por sus más de 45.000 desaparecidos, tanto en las calles como en las cortes; en Argentina después de 41 años siguen marchando las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo, con sus pañuelos blancos, reivindicando el derecho a la memoria y justicia; tanto en Uruguay como en Chile siguen las exigencias de verdad y justicia, y el pueblo chileno ahora lucha por el fin de los privilegios carcelarios que tienen los pocos militares que cumplen prisión en el Penal de Punta Peuco; en México, donde desaparece una persona cada dos horas, sigue vigente el clamor histórico “vivos se los llevaron, vivos los queremos”, y el pueblo sigue acompañando a las familias de los 43 normalistas de Ayotzinapa; también exige la aparición de las más de 37,000 personas desaparecidas desde el comienzo de la Guerra contra las drogas respaldada por Estados Unidos en 2007, y mantiene la memoria de los más de 70 mil migrantes y refugiados desaparecidos desde 2005 como consecuencia de las estrategias del imperialismo fronterizo de EE UU; y en Honduras, el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos, COFADEH, al mismo tiempo que realiza actividades de promoción y defensa de los derechos humanos siguen luchando por sus detenidos desaparecidos.
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