Asunción, 20 / 12 / 09 ( Agencia de Noticias Aratiri - A.N.A. ) Los organismos de DD.HH. denunciaron el resurgimiento de las bandas de civiles armados, las que históricamente han hecho el trabajo sucio de la policía en las zonas rurales de Paraguay.
Se conoció ayer que el 14 de diciembre pasado, en el asentamiento San Juan de Curuguaty, Yasy Cañy, Teodocio Gamarra Osorio, de 44 años fue golpeado brutalmente.
Gamarra Osorio pertenece a una organización del asentamiento campesino. Después de la garroteada le diagnosticaron “politraumatismo contuso muscular”.
Entre sus atacantes reconoció a Flaminio Cáceres Romero ( alias Pichón ) y a Carmelo Miranda Martínez quienes son miembros de la “Comisión Garrote” de la zona.
¿ Volvió la guardia urbana de seccionaleros de la época de la dictadura ?
En 2003, el gobierno en paraguay utilizaba civiles armados para garantizar territorialmente el régimen latifundista, agronegociante y pro yanqui.
El año 2004, el Dr Rodolfo Manuel Aseretto, abogado del Cipae ( Comité de Iglesias para ayudas de Emergencia ) denunciaba la muerte de campesinos y también que en Paraguay “sigue habiendo denuncias de atropellos, maltratos, torturas y violencia en los procedimientos policiales e inclusive se registran muertes de campesinos.”
Consideraba que el Paraguay “debe realizar una revisión profunda de los cuadros policiales como los de las FF.AA., a los efectos de depurarlas definitivamente pues a cada rato los policías se ven involucrados en hechos delictivos,” lo mismo ocurre con componentes de las FF.AA., se roban armas, roban rubros que deberían ser usados en la alimentación de los conscriptos” ( abc color 27 / 1 / 04 )
El 11 de diciembre de 2008, después de 61 años de violencia política el gobierno de Lugo con el decreto nº 1042, derogó el decreto nº 22.043 por el cual los colorados habían creado la Comisión Nacional para la Seguridad Ciudadana ( “comisión garrote,” ) constituida por el Ministerio del Interior, Policía Nacional, instituciones gubernamentales y sociedad civil ( abc color, 11 / 01 / 09. )
Esta señal positiva para la histórica lucha campesina por la tierra es el factor fundamental detrás del intento de golpe de estado.
Y por otro lado una de las razones por las cuales, aún hoy, el gobierno de Lugo es defendido por el campesinado.
Esta claro, que el poder real en el Paraguay promueve contra las organizaciones campesinas la violencia policial, de las fuerzas armadas, de las guardias privadas y de los parapoliciales de la “comisión garrote.” Recordemos que estas bandas de civiles armados, hicieron el trabajo sucio de los terratenientes, la policía y las FF.AA durante 61 años en el Paraguay.
aratiri.informativo@gmail.com - Redacción A.N.A.
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